Saludos a todos los seguidores de nuestro blog. Cada día sois más y eso nos alegra. Como sabéis no nos gusta hacer ‘post’ largos y tediosos. Aquí volvemos con uno sobre protocolo que trataremos de hacer sencillo y con claves directas. El momento de la foto. Nadie sabe cómo ni dónde poner las manos. Pues bien, en esta imagen, nadie hace lo debido. Aquí se trata de un acto en el que el presidente del Consejo Superior de Deportes, José Ramón Lete, reconoció la labor de los náuticos en su reunión con la CEACNA. La noticia y la foto la vimos en http://nauta360.expansion.com , excelente web dedicada al mundo de la náutica en España.

Antes de que se nos olvide, el lugar y la distribución del mobiliario y de los protagonistas no nos parece lo más adecuado. Hay sillas de por medio de la foto (se tenía que haber retirado) y se tapan las banderas oficiales (nadie debía haberse puesto delante). La primera bandera por la derecha, según se mira, debía haberse colado separada de las dos oficiales, además (no es oficial).

Pero a lo que íbamos. La pregunta es: ¿Qué hacemos con las manos? Desde luego no meterlas en el bolsillo (primer por la izquierda), tampoco ponerlas detrás como si te fueran a fusilar (segundo y tercero por la izquierda, y primero y segundo por la derecha). Ponerlas delante tapándose las partes nobles como hacen los jugadores de fútbol ubicados en la barrera durante un lanzamiento de falta, tampoco es recomendable (tercero, cuarto y quinto por la derecha). Las americanas, además, debían llevarse (segundo por la derecha) y cerrarse pues se está de pie (mal los que la llevan abierta). Cerrarse sin que se te abra, que también queda mal (primero por la derecha).

En conclusión, americanas cerradas y manos dejadas caer naturalmente junto al brazo. Felipe VI es un buen ejemplo para esto 🙂

Foto del acto. Nauta360 (Expansion).